Arranca el proyecto Lions2Life, un proyecto europeo promovido por EIT-Climate- KIC que pretende reutilizar las baterías de litio de los vehículos eléctricos para almacenar energía.
El proyecto está orientado sobre todo a los sistemas de movilidad eléctrica compartida que empiezan a proliferar en nuestras ciudades: patinetes, bicicletas y motos eléctricas. Ante el auge en las ciudades de este tipo de vehículos el proyecto Lions2Life busca la manera de no generar montañas de este tipo de residuos, sino que formen parte de una economía circular sostenible, donde al final de su vida, las baterías pasen a formar parte de los sistemas de almacenamiento de energía renovable.
Esto no es una quimera. Compañías como Tesla o Nissan están actualmente comercializando las baterías usadas de sus coches eléctricos como baterías de almacenamiento de energía para el hogar.
El proyecto ha generado una gran expectativa tanto en el sector de la movilidad compartida como en el de las energías renovables. Los primeros buscan una forma de poner en valor sus baterías usadas, mientras que los segundos buscan soluciones de almacenamiento que sean rentables y les permitan acomodar la oferta y la demanda de energía. Tanto es así que los responsables del proyecto se plantean la posibilidad de ofrecer alianzas a dichas empresas para ofrecerles el desarrollo de las soluciones tecnológicas que necesitan.
Ayuntamientos como los de Ribarroja del Turia o Paterna, socios del proyecto, coordinados y representados por AVAESEN, la asociación Valenciana de Empresas del Sector de la Energía a través de su Think Tank Smart Cities han mostrado también su interés. Otros ayuntamientos están en proceso de evaluación.
Entidades medioambientales tan importantes como ECODOM (Italia) y Recyclia (España) coordinan sus esfuerzos dentro del proyecto para que la re-utilización de las baterías sea una realidad que pueda trasladarse al resto de países de la Unión Europea.
El proyecto está liderado por la Universidad Politécnica de Valencia y Sustainable Towns, promotora del eco-barrio La Pinada, quien va a explotar la solución tecnológica de baterías de segunda vida. Otras empresas como Albufera Energy y Fibernova completan la apuesta industrial del proyecto.