Año 2030. La Comunitat Valenciana debe generar 10.000 megavatios con energías renovables, unos 6.000 a través de plantas fotovoltaicas, y el resto a través de la eólica.
¿Está la red eléctrica preparada para el transporte y distribución de esta cantidad de energía? Este fue el planteamiento inicial de una de las mesas del Congreso Energy Revolution celebrado en Valencia el pasado 26 de enero y que reunió a más de 300 profesionales de toda España.
El encargado de moderar la mesa y lanzar los temas a los invitados fue Joaquín Mas, Director General de Grupo ENERCOOP, quien afirmó en su presentación que “la red eléctrica debe evolucionar, y lo debe hacer no creciendo más, sino mejor. Ha llegado el momento en que crezca más inteligencia; no es inteligente a día hoy, es automática en su gestión. La red, los distribuidores y los transportistas son los garantes de que el sistema eléctrico sea resiliente. La red se tiene que convertir en algo flexible, capaz de pensar, evolucionar y apoyarse en un sistema multitecnológico”.
Con este planteamiento, lanzó cuestiones a los miembros de la mesa. La actualidad ha girado en los dos últimos años en torno al exceso o no de solicitudes de conexión para las renovables, produciendo “atascos” en los puntos de conexión. Así, planteó a Maite Vela, Delegada de la Región Este de REDIA si hay saturación en algunos niveles de la red y si las interconexiones con Europa pueden solucionar este panorama.
Maite Vela introdujo unas magnitudes en el debate, al aportar que hoy en día entre las instalaciones que ya vierten a red y las que están aprobadas, se multiplica por 1,5 lo que preveía el PNIEC en fotovoltaica y se multiplica por 3 en eólica. Un plan, el PNIEC, que tenía vigencia 2021-2030.
Así, Vela afirmó que “no solo hay que ser capaz de construir una planta, también hay que integrarla en la red, porque puedes tener restricciones y tu plan de negocio puede sufrir”, y añadió que “debemos hacer cosas adicionales para afrontar el crecimiento de las renovables en los próximos tres o cuatro años”.
Sobre la solución que aportaría la interconexión con Europa vía Francia, Maite Vela afirmó que “tras seis años de importar energía, en 2022 por primera vez hemos exportado más de 20.000 GW/hora. España pude ser una potencia renovable muy importante para sacar esta energía a Europa, lo que supondría que el desarrollo renovable pueda existir sin restricciones y que los proyectos puedan cumplir su plan de negocio. Pero para ello es necesario desarrollar las interconexiones con el sistema europeo. Deberíamos estar en el 10% de la capacidad instalada de interconexión, y no llegamos al 5%. En 2030 deberíamos estar en el 15%, si no lo solucionamos podremos tener mucha energía generada, pero ciertos problemas de integración”.
Para hablar sobre el punto de inteligencia de la red, Joaquín Más lanzó la cuestión a Ana Lafuente, Directora de i-DE (Iberdrola) de la Comunitat Valenciana y Región de Murcia. Lafuente afirmó que “el tener una base de red inteligente va a ser clave para abordar la integración de las renovables y en general de la transición energética, porque también hay que integrar el vehículo eléctrico y el autoconsumo”.
Sobre el momento en que nos encontramos afirmó que “hay que avanzar en darle funcionalidad a la red y tener más herramientas para gestionar la variabilidad del flujo en la red”.
En cuanto a la saturación de la red, aseguró que “es necesario tener herramientas de flexibilidad que permitan tener más generación renovable conectada pero con la misma red. Eso supone que el acceso y conexión no lo des todas las horas del año, sino que pedirías que X horas al año el generador dejara de hacerlo. Es un tema que debe ser regulado y nos daría la opción de gestionar mejor la red actual, ganando en inteligencia y digitalización de la red por supuesto”.
En la Comunitat Valenciana hay 35 pequeñas distribuidoras que operan en el territorio, especialmente en zonas de interior y más rurales. Para dar su punto de vista participó Jesús Mestre, de Eléctrica del Maestrazgo, quien puso sobre la mesa que “hay que observar lo que sucede en nuestra red, aumentar sensorización, diagnosis y digitalización y a la vez hay que ser capaz de afrontar los retos”, y añadió que “hay que coser el territorio y es lo que hacemos las pequeñas distribuidoras. Estamos en las zonas donde menos se ha desarrollado la red por la realidad económica y demográfica, con la red más poco capaz, pero a la vez en el foco porque son las zonas más atractivas hoy día por cuestiones de suelo para el recurso eólico y fotovoltaico”.
Por su parte, la Directora General de Industria, Energía y Minas, Maite Cerdà, expuso la visión de la administración autonómica y su papel “trabajando con todos los actores privados que quieren establecer sus plantas renovables en el territorio, trabajamos con solar, eólica o hidrógeno para hacer posible que la transición energética sea rápida, eficaz y sostenible”, y añadió que en todo este contexto hay que “proteger el territorio y hacerlo compatible con las energías renovables, para transitar hacia la independencia energética”.
Este es el vídeo completo de la mesa